Una de las maneras de que nuestro hijo tenga un nombre unico, poco comun y con gran significado es usar aquellos que la mayoría de las personas consideran pasados de moda. Puede que no sean tan pintorescos ni sonoros como los que conocemos actualmente, o que se encuentren prácticamente en desuso, pero estos esconden tras de sí significados y orígenes llenos de historia.
Ciro
Es utilizado desde épocas remotas y sus raíces derivan de la ancestral lengua Persa. Anteriormente se pensaba que era una palabra que estaba relacionada con el sol, otros sostenían que significaba “trono” e incluso algunos lo definen de manera más compleja como “el que humilla a su enemigo con palabras”. Personajes ilustres en la cultura persa llevaron este nombre, al igual que muchos santos del cristianismo.
Abundio
Este es uno de los nombres menos utilizados actualmente; sus orígenes son del idioma latín y se traduce como “abundante” o “copioso”. En épocas históricas existía un dicho que decía “más tonto que abundio”.
Fidel
Proviene del Latín y significa “fiel”. En épocas de antaño las personas que llevaban este nombre eran dignos de toda confianza.
Cipriano
Originalmente era un término empleado para hacer referencia a las personas originarias de Chipre, pero con el pasar de los años muchas culturas lo adoptaron como nombre propio masculino.
Héctor
Las raíces de este nombre se encuentran afianzadas en el griego antiguo y se le ha otorgado el significado de “poseedor”. Es un nombre popular gracias a la mitología griega que dicta la historia de un joven Príncipe Troyano, que peleó valientemente para defender su tierra.
Eliseo
Su origen es hebreo y se traduce como “Dios es mi salvación”. Tiene mucha relevancia en la religión cristiana pues según la biblia de este modo se llamaba uno de los profetas discípulos de Elías.